Este aguardiente toma su nombre de las pieles de la uva, llamadas “orujos” en Cantabria. Se obtiene con alcohol diluido en agua. Alcohol que se obtiene por la destilación de estos orujos, enfriando luego su vapor para reducirlo nuevamente a líquido.
Es Liébana la zona más popular de Cantabria en lo que se refiere a la producción de este licor, con una tradición que se remonta hasta la Edad Media. Hoy en día, se sigue utilizando para esta elaboración artesanal, las famosas alquitaras de cobre.
Aguardiente típico de Cantabria